La aplicación de las nuevas tecnologías en la medicina imponen cambios de calado en la atención sanitaria y en la relación entre aseguradoras, personal sanitario y pacientes.

“Antes de 2040, los cirujanos especializados utilizarán robots remotos para operar pacientes en diferentes continentes, los bebés tendrán su propio ADN secuenciado antes de nacer y los pacientes podrán generar nueva sangre dentro de sus propios cuerpos sin necesidad de un donante”, según el informe ‘El futuro de la salud, la atención médica y el bienestar’, publicado como parte de las Series Predictivas ‘El mundo en 2040’ y elaborado por Allianz Partners. El documento señala “cinco tendencias clave que colectivamente revolucionarán el panorama de la salud: la medicina personalizada, las células madre, la nanomedicina, la terapia y edición genéticas y la salud digital, incluso teniendo en cuenta que la medicina y la prestación de atención sanitaria tienden a ser sectores conservadores, lentos y muy resistentes al cambio”, según el futurólogo Ray Hammond, autor del informe. El mercado global del sector sanitario se estima actualmente en unos 8,1 billones de dólares al año y se prevé que el gasto global llegue a los 18,28 billones por año en 2040, revela.

Libre elección

En lo que toca a la asistencia médica gestionada por el seguro, Jaime Ortiz, director Comercial y de Marketing de Asisa, cree que “la incorporación de nueva tecnología requiere unas elevadas inversiones por parte de los prestadores de la asistencia. Esta realidad es fundamental para explicar por qué se está produciendo una concentración en el sector hospitalario, que tiene como resultado la creación de grandes grupos con capacidad inversora para seguir desarrollando una red asistencial moderna y dotada de la última tecnología. En ese escenario, las aseguradoras trabajamos de manera coordinada con los grupos hospitalarios para incorporar a nuestras pólizas los servicios y las técnicas más innovadoras de las que disponen”, explica.

Oriol Cascante, director Comercial de Clinicum, vaticina que “cada vez existirán más acuerdos con externos en beneficio del asegurado en cuanto a la rapidez en la información del diagnóstico, a la detección precoz de la enfermedad. De todos modos, no creo que ya estemos en el punto en el que se sustituya la visita del facultativo, por ejemplo”, matiza.

“No tenemos ninguna duda de que debe ser el cliente quien elija entre una buena oferta asistencial, sin dirigirle hacia un modelo de centros propios”, señala Pedro Orbe, director general Comercial de DKV. “Esta ecuación de aseguramiento + provisión asistencial es compleja, y no creemos que sea la solución de futuro. Dicho esto, la creciente concentración en la provisión asistencial que está ocurriendo en nuestro mercado, podría forzamos, en un futuro a cambiar esta estrategia”, admite.

En este punto, Ine Snater, directora Comercial de Sanitas, explica que, en el caso de su compañía, “nuestros clientes tienen plena libertad en la elección de los profesionales médicos. En este sentido, trabajamos por innovar en el cuidado de la salud y para ello nos aliamos con los mejores a través de acuerdos a largo plazo que permitan una relación estable con los centros de salud y hospitales más prestigiosos de nuestro país, permitiendo a nuestros clientes establecer una relación de confianza y sostenida en el tiempo con el profesional que ellos elijan para cuidar de su salud”.

Relación con el cliente

“La transformación tecnológica nos debe permitir establecer un nuevo tipo de relación con los clientes”, defiende Jaime Ortiz, director Comercial y de Marketing de Asisa. “El seguro de Salud, apoyado en la tecnología, debe facilitar los procesos de contratación online y el acceso a los servicios contratados. Los nuevos clientes están acostumbrados a comprar en un click y las aseguradoras de Salud debemos aplicarnos para dar esa misma experiencia de cliente a nuestros asegurados”, afirma.

“Sin duda alguna, las nuevas tecnologías han agilizado la relación entre compañía aseguradora y personal sanitario (o proveedor sanitario)”, observa Oriol Cascante, director Comercial de Clinicum. “Las nuevas tecnologías han ayudado a simplificar procesos de gestión diaria y acortar tiempos de respuesta que, finalmente, acaban repercutiendo positivamente en el servicio que se presta al asegurado. Por poner un ejemplo, en nuestro centro médico, cualquier prueba que se haga un paciente está disponible inmediatamente en el historial médico y accesible a todos los profesionales sanitarios. De esta manera, acortamos tiempos de espera, la visualización de la prueba es mucho mejor (por ejemplo, permite ampliar la imagen) y, al final, todo eso favorece el diagnóstico y beneficia al propio paciente”, explica.

Prevención

esde UM Seguros consideran que “la monitorización de la salud de los clientes mediante herramientas proporcionadas por las aseguradoras, documentando los perfiles con sus informes e historial médico, nos parece que puede ser lo más relevante” de cara al futuro en el ramo en el aspecto tecnológico. “Esa información será muy útil para todos permitiendo afinar todavía aún más la relación existente con los clientes haciendo además crecer exponencialmente la prevención de la salud”, remachan.

“Desde el momento en que un paciente puede conocer y cuidar su salud vía móvil en su día a día, y puede recurrir al asesoramiento médico cuándo y dónde lo necesite, mejora la accesibilidad y la experiencia de los clientes”, abunda Ine Snater, directora Comercial de Sanitas. “Cuidar la salud será una responsabilidad diaria de cada persona, que cuenta para ello con aplicaciones de monitorización, información y con la posibilidad del asesoramiento externo del personal médico a través de la vídeoconsulta. Este modelo de responsabilidad personal de la salud desemboca en un sistema preventivo que aporta, en primer lugar, grandes beneficios para la persona y, en segundo lugar, una utilización más eficiente de los recursos sanitarios. Las nuevas tecnologías permiten a la sociedad mantener una postura activa, buscando información y asesoramiento, por un lado, y accediendo al abanico de servicios sanitarios que ya se ofrecen vía móvil, por otro. Por lo que el ramo debe adaptarse a esta nueva realidad que busca no solo cuidar de la salud si no un sistema que le permita ayudar a prevenir enfermedades y mantener unos hábitos de vida saludable”, sentencia.